Hennessey Performance es una compañía que se encarga de modificar vehículos, en su mayoría deportivos, para llevarlos al extremo de sus aptitudes. La base está en Texas, Estados Unidos, allí se fabrican los motores aunque carrocerías y ensamblajes se realizan en Inglaterra. Y es noticia, por estas horas, en el mundo de los récords de velocidad.
Con su Venom GT, ni más ni menos que un chasis de Lotus Elise reformulado, estableció un nuevo récord mundial de velocidad para vehículos de producción al ir hasta los 435, 31 km/h (270.49 mph), como figura en la computadora que lo registró).
Esta locura, para algunos, o hazaña de la tecnología, para otros, se realizó en la pista de aterrizaje del Centro Espacial Kennedy de la NASA en Cabo Cañaveral (Florida). De todos modos, la opinión de los ingenieros y del propio piloto, Brian Smith, fue que en un óvalo o en una pista más extensa a esta de 4,2 km, la velocidad hubiese sido aún mayor.
El Venom GT tiene un motor V8 biturbo de 7.0 litros con 1.244 caballos y tiene un peso de 1.244 kilogramos, por lo que ofrece una relación peso potencia de un caballo por kilo. Una verdadera locura. Hasta el momento se han vendido 11 unidades en todo el mundo y está prevista la fabricación de 29. Esto lo define como una marca realmente exclusiva.
Tan es así, que el cantante de Aerosmith, Steven Tyler, pidió una versión especial sin techo y finalmente su deseo fue concretado. Y por eso, a mediados del año pasado, depositó 1.100.000 dólares y desde ese momento guarda en su garage un Venom GT Spyder.
Para volver a esta prueba de máxima velocidad, un representante de Racelogic, fabricante mundial de sistemas de adquisición de datos GPS, fue el encargado de verificar de forma independiente el récord de velocidad.
Sin embargo, de momento no aparece en el sitio del Libro Récord de los Guinness, ya que para homologar dicho galardón debió haber recorrido la pista en ambos sentidos para establecer una media que compensase la inclinación de la misma y deberían fabricarse y comercializarse al menos 30 unidades. De este modelo sólo se harán 29... Pero además, la firma no logró, tras dos años de negociaciones, el permiso para hacer más de una pasada en esta pista.
De todos modos, y se toma como válida la proeza, el Venom GT supera al Bugatti Veyron 16.4 Super Sport, que logró ir a 431,07 km/h en Alemania, hace ya tres años.
Sí figura en el Libro Récord de los Guinness otro logro del Venom GT: el récord de velocidad con partida detenida. En apenas 13,63 segundos fue de 0 a 300 km/h.
Fuente: DeAutos.com
